12 febrero, 2010

En las escaleras.

Tengo un problema, y es que me cuesta confiar en la gente porque tengo miedo a que me hagan daño pero, cuando, por fin, lo consigo, doy demasiado, casi hasta agobiar a mi cómplice. A veces, siento que no importa lo que tenga que decir o lo que tenga que callarme. No quiero seguir con esto más tiempo, sé que acabaré peor, que me dolerá más que si me hubiese callado. La verdad es que no hubiera estado nada mal cerrar la boca por una vez. Quizás ahora no estaría llorando, ni gritando a un oso de peluche que ha pasado a formar parte de las escaleras.

1 comentario:

  1. ..escoger es arrogante, eso me han dicho a mí. Pero pocos son los que logran comprender cuanto te rasguña por dentro el menosprecio porque sencillamente no ven las cosas como tu... como nosotros. Creen que están en lo correcto. Yo creo que no

    ResponderEliminar